Afrodita

Hoy os hablaremos de Afrodita, la antigua diosa griega del amor, la belleza y el deseo. Reunía en sí misma todos los aspectos de la sexualidad hasta tal punto que, con tan solo susurrar al oído tanto a dioses como a mortales, podía hacer que estos no pudieran negarse a yacer con ella.

Afrodita también tuvo un papel importante en el comercio, el campo de batalla y en la política de las ciudades de la Antigua Grecia. Asimismo, fue honrada como protectora de aquellos que navegaban el océano, de las cortesanas y las prostitutas.

Existen dos versiones de cómo fue su nacimiento. En una, Afrodita nació cuando Cronos castró a su padre Urano y lanzó los genitales al océano, de donde Afrodita surgió de la espuma. En la otra versión, es la hija de Zeus y la titán Dione.

Afrodita estaba casada con Hefesto, dios del fuego y la fragua, pero tenía varios amantes, entre ellos Ares, dios de la guerra, y el joven mortal Adonis, de quien se enamoró por su belleza.

Era venerada en todo el mundo griego, especialmente mediante festivales llamados Afrodisias. En algunos templos consagrados a ella se practicaba una forma de prostitución ritual para honrarla.